¿Se puede repartir una herencia sin estar todos los herederos de acuerdo?

En el reparto de una herencia influye mucho la cantidad de personas con derecho a recibir bienes. Por norma general, cuantos más herederos haya, más complicado resulta todo, y más se alargan los procedimientos.

Desgraciadamente, es bastante habitual que surjan problemas de herencias en las familias, ya que no todos suelen estar conformes con el reparto o con otros detalles. Entonces, ¿qué se puede hacer en esos casos? ¿Es posible repartir una herencia si no hay acuerdo entre los herederos? Si te encuentras en un caso así, sigue leyendo para conocer nuestras recomendaciones.

Los problemas de las herencias y la falta de acuerdos

Como hemos contado en otras ocasiones, una herencia es un proceso burocrático complejo en el que influyen mucho los sentimientos. Para empezar, no todos los parientes están dispuestos a iniciar los trámites de una herencia al mismo tiempo. Los hay que a los dos días ya quieren empezar y hay otros que, pasados varios meses, aún no se sienten con fuerzas.

La cuestión es que, lo quieran o no, todos los herederos habrán de ponerse de acuerdo para iniciar este procedimiento. La realidad es que la herencia no se puede repartir formalmente hasta que todos los beneficiarios acepten o renuncien a su parte. De lo contrario, ya tendríamos ahí un primer bloqueo.

Precisamente, a veces el problema principal es tan simple como ese: hay algún heredero que no ha manifestado su posición aún. En ese caso, existen procedimientos previstos por vía notarial que obligarían a dicho heredero a posicionarse en un tiempo limitado. De no hacerlo, se entenderá que ha aceptado su parte, sin más.

La legislación española en materia de herencias es amplísima (y, por tanto, su jurisprudencia) y es muy difícil que una situación no se haya dado antes. Por ese motivo, no debemos temer, ya que todos los escenarios tienen una vía de solución. Ahora bien, puede haber soluciones forzosas que perjudiquen a los plazos o a los intereses de algunos herederos. Lo mejor siempre es llegar a acuerdos.

¿Se puede obligar a repartir una herencia?

Visto lo anterior, la realidad es que sí se puede repartir una herencia sin que todos los herederos estén de acuerdo, pero no es fácil, rápido ni deseable. Un acuerdo es siempre la vía más satisfactoria para llevar a cabo una herencia, y la que provoca menos problemas a todos.

Existen tres tipos de aceptación de una herencia:

• Aceptación expresa: simplemente declarando que aceptas tu parte íntegramente.

• Aceptación a beneficio de inventario: aceptas tu herencia pero sólo la parte libre de cargas. Es decir, si hay deudas en la herencia, se liquidarán bienes, se pagará lo que se deba, y después, si queda saldo positivo y/o propiedades, las recibirás. Si el saldo es negativo, no recibes nada, pero tampoco cargas con las deudas restantes.

• Aceptación tácita: esto se da cuando, aún cuando no se haya manifiestado, se entiende que el heredero acepta la herencia. Por ejemplo, haciendo uso de una propiedad inmobiliaria o de los bienes de la herencia.

La cantidad de conflictos que pueden darse ante una herencia son casi infinitos. Desde familiares que ocupan ilegalmente una casa, a otros que impiden registrar la propiedad que se hereda. Al final, todos los problemas que se generan van alargando los plazos para finalizar el trámite de la herencia y hay algunas que se eternizan.

En principio, el único requisito de tiempo que sí urge es el del pago de Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Hay seis meses de plazo para hacerlo, si bien se puede solicitar un aplazamiento de otros seis meses más.

Si no se ha abonado este impuesto en el plazo legal, eso repercutirá muy negativamente en todos los interesados, pues habrá sanciones e incluso Hacienda podría intervenir la herencia, ya que de pagar los impuestos no se libra nadie.

¿Se puede aceptar una herencia individualmente?

Bueno, uno puede aceptar la herencia individualmente, desde luego, pero eso sirve de poco si el resto de herederos no la aceptan también (o renuncian a ella). Volvemos a lo de siempre: sin que las posturas de todos estén claras es imposible recibir la herencia. Y después de eso, las partes han de estar conformes con el propio reparto.

Salvo en aquellos casos en que exista un único heredero universal, las herencias son, por normal general, un acto conjunto de varias personas. Y además, éstas han de ser capaces de acordar como mínimo el pago de gastos y ciertos trámites.

Por suerte, en casos de conflicto enquistado, es posible hacer un reparto de la herencia incluso si los herederos no están de acuerdo. Para ello habría que recurrir a la partición judicial. Este no es un trámite deseable, sino de último recurso, y aunque acabará resolviendo la situación, seguramente no satisfaga a nadie.
La cuestión es que la partición judicial añade costes al procedimiento, añade tiempo extra y lo peor de todo es que suele conducir a la subasta pública de propiedades. Y todos sabemos cómo acaban todas las subastas públicas: con ventas a precios irrisorios que distan mucho de su precio de mercado.

¿Se puede repartir una herencia sin estar todos los herederos presentes?

La respuesta a esta pregunta es relativa. Técnicamente sí es posible repartir la herencia sin que todos los herederos estén presentes. Sin embargo, sería una respuesta con truco. En realidad, aquellos que no estén presentes deberían tener un representante legalmente acordado mediante un poder notarial.

También sería posible que alguien representase a un heredero mediante acuerdo verbal, pero la herencia no tendría validez hasta que el interesado ratificase su postura. Por lo tanto, en realidad sería un trámite inútil, ya que es el heredero quien debe pronunciarse finalmente y, mientras tanto, la herencia seguirá bloqueada.

Finalmente, todos los herederos deberán llegar a un acuerdo también para repartir los gastos de la herencia, lo cual puede ser otro motivo más de disputa.

Sin duda, resolver los conflictos que pueden surgir en una herencia no es una tarea sencilla. Ahora ya sabes que es posible repartirla aunque los herederos no estén de acuerdo en nada, pero probablemente eso sólo sirva para perjudicar a todos los participantes.